Repasamos hoy la carrera de uno de los compositores más laureados del cine, aunque también de los más criticados debido a lo poco convencional de su música; el hombre que Tarantino con películas como "Kill Bill", "Death Proof" o "Malditos bastardos" está sacando del baúl de los recuerdos.

Su fama se debe en gran medida a su genial música para los llamados "spaguetti western", comenzando de la mano de Sergio Leonne.

"Ecstasy of gold" en "El bueno, el feo y el malo" tan conocida ya esta pieza que hasta "Metallica", entre otros, ofrecían su particular tributo.

Pero no solo vivió del western, ya que en los setenta, coincidiendo con el comienzo de la decadencia del género, comenzó a trabajar con diversos directores y en toda clase de géneros.

Recordemos su inquietante música para "La cosa" de Carpenter, o la belleza de composiciones como "El oboe de Gabriel" de la b.s.o de "La misión" entre otras muchísimas piezas de tan dilatada carrera del genio Morriconne, historia viva del cine.